Encuentro (Antonella)

Un infierno, eso es lo que vivía desde hace un tiempo, no sabía cuanto tiempo iba a durar pero para mi era un suplicio, algo horrible que tenía que acabarse. ¿Que podía haber pasado? solo caminaba por la calle y algo me había mordido en el cuello, ¿pero qué demonios le pasaba a mi cuerpo?, ¿por qué no podía dejar de gritar de dolor?, ¿por qué nadie me ayudaba?

Iba caminando por la calle cuando lo oí, eran gritos, unos horribles gritos de dolor, me acerqué al oler la sangre, era sangre manchada y no por cualquier cosa, en la sangre había ponzoña.
Me acerqué a la persona que gritaba por la pinta era tarde, la ponzoña no se podía extraer y tampoco se le podía dejar allí tirado o nos descubriría.
- Dios mío - dije en voz baja - ¿quién te ha hecho esto?

Hoy estaba de guardia, las cosas en el castillo no estaban precisamente bien, de repente olí a Antonella y un aroma de sangre con ponzoña.
- Nella, Nella ¿qué has hecho? no puedes transformar sin permiso.

- No he sido yo Demetri - dije mirando al chico - lleva horas aquí tirado, huele su sangre está completamente manchada. No podemos dejarlo aqui.

oía voces, primero una cantarina y hermosa y luego otra mas varonil, ¿me ayudarían?
- Ayuda - dije en un grito, una mano fría me acarició la frente.

- Anto - dije serio - sin la aprovación de Aro...

- Por favor - supliqué - yo responderé por él, te lo juro no le quitaré el ojo de encima.

- Debo de estar loco para hacer esto pero lo llevaré a la habitación - dije moviendo la cabeza - pero haz que deje de gritar.

- ¿Cómo? - dije asustada, el alzó una ceja - ¿el poder?, bueno de acuerdo.
Me acerqué al oido del chico y con voz dulce le dije:
- Te pondré a salvo pero debo prohibirte que grites - el chico dejó de hacerlo - eres un chico bueno.

- Le pondré a salvo - dije mientras le cogía - ahora ve a la sala hay reunión Vulturi.